Bueno, aquí de nuevo con otra entrada, en este caso más relacionada con la orientación laboral, aquello que me ocupa actualmente.
Tal y como apunta el epígrafe de esta entrada voy a hablar aquí de algo que leí el otro día en un artículo (Mariana Segura) pero para exponer mi punto de vista.
Tal y como apunta el título, la mayoría de las técnicas de orientación laboral (por no decir todas) tienen un carácter conductual. Por ejemplo, cuando entrenamos a una persona para hacer entrevistas, lo que estamos haciendo es instaurar un repertorio de conductas que, o bien ya tiene la persona o bien enseñamos a manejar (usar la sonrisa, dar la mano con firmeza pero sin exagerar, mirar a los ojos al entrevistador, utilizar un vestido adecuado...), pero en todo caso van acompañadas de patrones de reforzamiento variables, es decir, no se sabe cuando va a venir el refuerzo (tener éxito en el proceso de selección), por tanto, son los programas más resistentes a la extinción que hay.
Al igual que en una máquina tragaperras (permitidme la comparación aunque no tengan nada que ver, pero sí en cuanto al patrón de reforzamiento), no sabemos cuando nos va a llegar el premio y, por mucho que hagamos, nuestras conductas no van a hacer que éste llegue antes. En cambio, en las entrevistas sí podemos hacer que la gratificación llegue antes, o bien haciendo mayor número de entrevistas, o bien enviando mayor número de currículum o bien llamando a los responsables del proceso de selección... pero podemos tener cierto "control" sobre cuándo va a llegar nuestra gratificación que según lo habilidosos que seamos nos puede llegar más tarde o más temprano.
Por el contrario, en la máquina tragaperras por más que mejoremos nuestra eficacia en el desempeño de la conducta de jugar no va a llegar antes el premio, simplemente introduciendo mayor número de monedas, pero ésta conducta no lleva ningún grado de especialización, es decir, no hay que hacer un apredizaje especial para introducir un mayor número de monedas en la máquina, sólo hacerlo; sin embargo para mejorar en nuestros procesos de orientación laboral (y, por consiguiente de búsqueda de empleo), es conveniente especializarnos en las diferentes técnicas de búsqueda de empleo que se realizan en todos los programas en España. Así, habrá personas que necesiten mejorar en cómo hacer las entrevistas, otras en técnicas de búsqueda de empleo individual (CV, carta de presentación, organización de la búsqueda, uso del teléfono...), otras en técnicas de búsqueda de empleo grupal, etcétera. Pero todas ellas tendrán en común que son Modificación de Conductas anteriormente adquiridas con un mismo objetivo: encontrar empleo.
Supongo que habrá personas que estén de acuerdo con este punto de vista y personas que no lo estén, pero lo que está claro es que la orientación laboral en sí misma es Modificación de Conducta pura y dura, os guste o no.
En fin, sin más me despido hasta la próxima entrada en la que espero trataré temas más mundanos y cercanos a la mayoría de los mortales. Un saludo y hasta la próxima.